miércoles, 24 de diciembre de 2008

FELICES NAVIDADES


FELIZ NAVIDAD 2008

Hace más de dos mil años que dos personas humildes y normales, María y José, llegaban a Belén y tenían que refugiarse en un establo. Allí, con el calor de rudos y nobles animales, María dio a luz a un niño: Jesús.

Su vida fue un ejemplo y mensaje de amor, paz, justicia, igualdad. Esta noche es especial; pero debemos recoger su testigo para cambiar un poquito este mundo y extender por él las cuatro enormes palabras que antes he citado.

Seamos valientes.

domingo, 14 de diciembre de 2008

"S"

Una desconocida morena melena
que, al volverte,
me presenta una piel canela,
unos deseados labios,
unos sorprendidos ojos,
una preciosidad de carita
moldeada por la diosa de la hermosura.

Y ya caí enamorado.

Tus acertadas palabras,
tus inseguridades confesas,
tus emocionantes andares,
tus esperanzadas preguntas.

Y el temblor de mi cuerpo y de mi alma
pensando en ti.

Ese primer beso
imprevisto por necesario,
necesario por deseado,
deseado por enamorado,
enamorado por robado,
robado por entregado,
nunca olvidado
siempre recordado.

Y todavía lo siento.
¿Acaso tú también?

BUENOS DÍAS, MARIE.

Demasiado tiempo sin escribirte y no porque no tuviese ganas, sólo que he estado muy liado.
Los débiles fríos que anteceden al invierno me han obsequiado con una infección de "narices", nunca mejor dicho. Ya me encuentro mejor y me están preparando una prometedora vacuna. Y es que como me pase dos días sin disfrutar de un buen sol mis defensas salen huyendo. Seguro que tendré una recaída cuando vaya a pasar la Navidad a Zamora; así que iré provisto de mi arsenal farmacéutico.
Nada malo comparado con mi decisión de cortar toda ligazón con la persona más importante de mi vida hasta que recupere el sentido y la sensibilidad. Hay cosas que, como no las merezco, no las puedo permitir. Tengo que mirar la vida hacia adelante, con la cabeza alta, sin esconder mi dignidad. Disfrutar de mis escasos amigos y amigas que son un lujo y un orgullo, siempre pendientes de mi.
Pero, a veces, mi alma flaquea y hay una duda que me acecha algunos días: ¿volveré a besar los labios de una mujer, entregados ambos de amor y pasión?.
No sé la respuesta. Deseo que sí y que sea contigo.
Hasta luego, mi Marie.

viernes, 5 de diciembre de 2008

"U"

Ver "nuestra estrella" dos días en una semana era algo ya insólito para mí.
Aunque mi auténtica estrella has sido tú.
Ya de noche, camino del Puerto, me la topé antes de las cuestas del Cedacero justo donde, al comienzo de un triste verano, nos despedimos por la fuerza de mi estupidez. No la perdí de vista bajando, subiendo y en el tobogán del descenso.
Y en ella te veía a ti, mi auténtica estrella.
En tan corto trayecto toda nuestra película inacabada pasó por mi loca cabecita, seguro de que tú también buscas verla y rememorar los atropellados momentos vividos.
Estrella que sin tu ser no tendría vida.
Apenas unos días después, junto al vagón que me llevaría a Madrid, de pie apurando el último cigarrillo antes de emprender el necesitado viaje, levanté mis ojos al cielo y me sorprendí al verla tan hermosa y elevada, como despidiéndome con una hasta pronto lleno de buenos deseos y esperanza.
Y me encomendé a ella como lo hice a nuestro amor durante tantos años.
Estrella eterna eres tú.